La actualización responde a la reprogramación del mercado eléctrico mayorista realizada por Cammesa y a los lineamientos fijados por la Secretaría de Energía de la Nación.
Para agosto, el precio promedio por kilowatt hora será de $6,516 para usuarios sin subsidio, $2.656 para el segmento N2 y $3.454 para N3, con ajustes menores previstos para septiembre y octubre.
El Valor Agregado de Distribución (VAD) se mantendrá sin cambios, dado que la inflación trimestral no superó el 7% establecido en el marco regulatorio. Las distribuidoras aplicarán automáticamente la actualización a los consumos registrados desde el 1 de agosto, conforme a las resoluciones e instructivos vigentes.
Las tarifas mantienen el esquema de segmentación vigente para usuarios residenciales —N1 (altos ingresos), N2 (bajos ingresos) y N3 (ingresos medios)— con precios estacionales de referencia, bonificaciones y topes mensuales de consumo subsidiado. Quienes superen ese límite abonarán el excedente al valor pleno. También se fijaron valores especiales para entidades de bien público, clubes de barrio y pueblo, y usuarios bajo el régimen de generación distribuida.
La medida se oficializó a través del Boletín Oficial.